Esta mañana pasé por delante de la Fonda Veracruz y me encontré con una preciosa estampa: la hiedra que cubre sus muros y la entrada estaba preciosa, vestida con los colores ocres y rojizos del otoño.
Se encuentra en la empinada calle Veracruz, que sube desde la calle Tentenecio prácticamente paralela a la muralla. Esta calle fue el centro neurálgico del antiguo barrio judío de Salamanca, del que no queda apenas nada. En la parte de arriba de la calle se encuentra la facultad de Matemáticas en el lugar donde estaba la antigua sinagoga. Una placa nos lo recuerda.
Utilizada como fonda en el siglo pasado, hoy restaurada, es la escuela de hostelería. Cuando subimos con los grupos a media mañana vemos a los futuros chefs y cocineros que salen con su uniforme y a veces con sus gorros a tomar el cafetito.
Esta foto es de la entrada, se accede a través de una reja, a los lados de la puerta hay dos ventanas que tienen el mismo tipo de enrejado.
La siguiente foto es del interior, el patio que da acceso al edificio. El muro que se encuentra frente a la puerta de acceso al patio y el lado derecho están cubiertos por la hiedra, preciosa en este momentos con los colores del otoño. Curiosamente, el muro de la izquierda no tiene hiedra.
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