ARTE EN EL CAMINO DEL AGUA

"El terreno no es escenario de la obra, es parte de la obra" Walter de María

Hace unos días hicimos ruta de senderismo "El camino del agua", en aquel post hablé del recorrido, la naturaleza, el paisaje... Hoy vamos a hablar de las obras de arte que se pueden ver en el recorrido.
Se enmarcan dentro del Land Art, (se puede traducir como arte en la naturaleza, arte y tierra...) una corriente artística que con frecuencia utiliza tanto el marco como los materiales de la propia naturaleza. Las obras de arte se encuentran en el exterior sometidas a la acción de los elementos y a la erosión. Esta corriente artística nació en Estados Unidos en los años sesenta. Muchos artistas quisieron sacar las obras de arte de los museos, y les pareció un buen lugar integrarlos en la naturaleza. Algunas de aquellas primeras obras ya han desaparecido, es por tanto, un arte en cierta manera efímero. Interviene y modifica el paisaje con elementos añadidos o modificando los propios elementos que encuentra en ella. Por este motivo hay algunos detractores que no están de acuerdo en este tipo de arte, ya que piensan que la naturaleza no se debe modificar. La propia naturaleza también modifica la propia obra de arte, cambiando el color con el paso del tiempo, o a través de la vegetación. Creo que para todos son conocidos los bosques pintados. Un ejemplo de este arte era el ya desaparecido bosque de olmos de Agustín Ibarrola, junto a la iglesia del Arrabal.
La primera obra que nos encontramos es una jaula: K´oa. El artista nos dice que "la K´oa es un ritual milenario de reciprocidad con la Pachamama (deidad de los pueblos indígenas de los Andes). Se realiza sobre una pequeña brasa donde se quema todo aquello que vuelve a la madre tierra en gratitud y pidiendo protección para todos los miembros de la familia" 

Tunupa       Dijo Dios: que exista la luz...

uiracochan / pachayacha    ... la bóveda del cielo...

pachamama / cochamama       ... la tierra y los mares...

inti / quilla       ... el sol y la luna...

illimani / illampu       ... los peces y las aves...

ymaymana / mallqui      ... el hombre y la mujer...

mus magua pao       ... y vio que todo era muy bueno...

K´oa- Miguel Poza

La siguiente foto es "Serena" de Virginia Calvo: "Me gusta intervenir en la naturaleza con algo que tenga alguna relación directa con ella, como pueden ser  los seres fantásticos o míticos, como duendes, hadas, brujas…, que en el imaginario popular están  asociados a la naturaleza."
Ella nos cuenta que por esta zona existe en el imaginario popular un tipo de sirena denominada Serena, que suele proceder de una maldición de los padres ante una hija díscola. Habitan en los ríos, son muy bellas y son mitad mujer, mitad pez. Su voz es embriagadora y peligrosa, como se resume en esta copla popular en la que la Serena se dirige a un pastor que la sorprende en la orilla del río donde vive:

"Como ya me descubriste

tienes los días contados

que soy la mitad mujer

y soy la mitad pescado"

Serena- Virginia Calvo

La siguiente está en el mirador de Monforte, en una parte del camino que trascurre por la carretera. Es de bronce, su color se va modificando con el paso del tiempo “Esta obra traduce el murmullo del agua, la brisa a la orilla de los arroyos, la llovizna, el sentir del aire fresco en nuestra cara, las cosas sencillas de la naturaleza...” A mí me parece una especie de pluma clavada en el suelo...

S/T. Alfredo Sánchez

La foto siguiente es de las sillas, las vemos en el puente de los Molinos, y en el puente del Pontón. Tienen la misma forma, pero distinto tamaño y altura.

"Siete sillas que son mujeres, hombres,

niños, jóvenes, adultos, ancianos...

Siete sillas para escuchar,

Siete sillas cerca  del río, del puente, del agua, en la sierra,

Siete sillas para escuchar.

Siete sillas donde parar, sentarse,

contemplar y no pensar en nada.

Siete sillas para escuchar"

Siete sillas para escuchar. Manuel Pérez de Arrilucea

Y por último, al final del camino se encuentra la Cruz de Mingo Molino, obra de Florencio Maíllo. La torre simboliza las construcciones de los paredones que se despliegan a lo largo de las laderas de la sierra, evitando la erosión del suelo al controlar los fluidos de las violentas precipitaciones de las estaciones lluviosas. Su altura es una alegoría a la imaginación y dedicación del serrano a su entorno natural, la pared como represa y control de la fluidez del agua. El ciprés como árbol de la memoria.

Cruz de Mingo Molino. Florencio Maillo